Lilly

Eli Lilly es una de las diez farmacéuticas líderes en el mundo. Durante casi 150 años, hemos sido pioneros en descubrimientos que cambian la vida y, hoy en día, nuestros medicamentos ayudan a más de 47 millones de personas en todo el mundo. Aprovechando el poder de la biotecnología, la química y la genética, nuestros científicos están avanzando sin descanso en nuevos hallazgos para resolver algunos de los desafíos de salud más importantes del mundo, redefiniendo el cuidado de la diabetes, tratando la obesidad y reduciendo sus efectos más devastadores a largo plazo, avanzando en la lucha contra la enfermedad de Alzheimer, proporcionando soluciones a algunos de los trastornos del sistema inmunológico más debilitantes y transformando los tumores más difíciles de tratar en enfermedades manejables.

La huella de Lilly está presente en los cinco continentes gracias al trabajo de 38.000 empleados. Nuestros medicamentos llegan a 124 países, desarrollamos investigación clínica en más de 55 y contamos con instalaciones de Investigación y Desarrollo en siete.

Lilly está presente en España desde 1963, concretamente en Alcobendas (Madrid). Las instalaciones acogen el Centro de I+D, el más importante de España para el descubrimiento de nuevos fármacos orales innovadores, y la planta producción, desde la que se envían medicamentos a 120 países, además de las oficinas y la sede de la Fundación Lilly.

Somos uno de los principales empleadores del mundo y asumimos esta responsabilidad en primera persona, siendo consciente de que las compañías preferidas por los profesionales son aquellas que ofrecen oportunidades de desarrollo profesional y flexibilidad para compatibilizarlas con la vida personal. En España, ya somos más de 1.000 empleados y continuamos esforzándonos por atraer, desarrollar y retener el talento. Ofrecemos desarrollo profesional, beneficios sociales, medidas de conciliación, además de un entorno de trabajo en el que la seguridad y la salud son fundamentales. Estos son los motivos que llevan a Lilly España a ser elegida, año tras año, como una de las mejores empresas para trabajar en el ranking Best Place to Work.

El propósito de Lilly -que es unir el cuidado de la salud con la investigación para crear medicamentos que mejoran la vida de las personas en todo el mundo - comienza con los pacientes y se extiende a toda la sociedad, especialmente a los grupos más vulnerables.

La integridad, la excelencia y el respeto por las personas son los tres pilares consolidados que nos guían en todo lo que hacemos.  Somos honestos en nuestras interacciones con pacientes, empleados, accionistas, socios, proveedores, competidores y las comunidades a las que prestamos nuestros servicios. Estamos comprometidos con el bienestar de toda la plantilla, por lo que promovemos una cultura de diversidad donde todas las personas que conforman nuestro equipo se sientan seguras y valoradas para poder desarrollar su trabajo.

Más allá de nuestros medicamentos, invertimos nuestro tiempo, experiencia y recursos en impulsar el impacto social con un enfoque en la salud a través de la colaboración constante con el ecosistema científico y los profesionales sanitarios, para promover la formación continua, el apoyo a la práctica clínica y el reconocimiento a la investigación.

Nuestro compromiso con la sociedad se lleva a la práctica a través de la Fundación Lilly que promueve el desarrollo de la Medicina, la Ciencia y el Humanismo, así como con la puesta marcha de diferentes proyectos, entre los que se encuentran iniciativas de voluntariado corporativo. Asimismo, contribuimos a la lucha contra la emergencia climática a través de la mejora de aspectos medioambientales concretos, como la eficiencia de nuestro consumo energético.

En Lilly entendemos la diversidad como un importante activo, por lo que nos esforzamos en desarrollar y retener el talento, así como por promover una cultura con la que todas las personas que conforman nuestra plantilla se sientan seguras y valoradas para poder desarrollar su trabajo. Creemos que estas convicciones no solo son éticamente indispensables, sino que también aportan beneficios significativos en términos de creatividad, innovación y rendimiento.  

Nuestros valores de integridad, excelencia y respeto fomentan un entorno en el que se anima a las personas que trabajan en la compañía a compartir ideas y participar plenamente en el modelo de negocio y empresa que queremos ser. Una filosofía que se materializa en nuestras políticas, gestiones y buenas prácticas. Buen ejemplo de ello son el Plan de Igualdad, que parte del compromiso de la empresa con la igualdad de oportunidades, así como el Programa de Diversidad e Inclusión, integrado en nuestro plan estratégico.

Tanto los puestos de trabajo, como el resto de nuestras instalaciones, han sido adaptadas tecnológica y arquitectónicamente para las personas con discapacidad a través de nuestro programa Access Lilly, lo que nos convierte en un lugar para trabajar accesible para todos. En este sentido, facilitamos a los integrantes de la plantilla el contenido de la Guía de Consejos para una Comunicación Inclusiva con pautas y recomendaciones para lograr un lenguaje inclusivo de género y conocer la terminología adecuada sobre discapacidad. Además, les proporcionamos pautas para conseguir una buena integración en el equipo.

En Lilly creemos que cada persona posee unas características que la hacen única, por lo que nos comprometemos a acoger, respetar y valorar esas diferencias. Esta política se articula en la sede española a través del Decálogo de Diversidad y se organiza en torno al equipo de diversidad denominado Diversity Champions con ocho personas de diferentes áreas, edades y nivel de responsabilidad dentro de la empresa.